Mi Recurso Adventista

¿Y si yo fuera un robot?

06 de febrero | Devoción Matutina: El fascinante laboratorio De Dios

«Si no quieren servir al Señor, elijan hoy a quién van a servir: si a los dioses a los que sus antepasados servían a orillas del Éufrates, o a los dioses de los amorreos que viven en esta tierra. Por mi parte, mi familia y yo serviremos al Señor.» (Josué 24: 15)

LOS ROBOTS FORMAN PARTE DE NUESTRA REALIDAD HOY DÍA, estando presentes en la industria, en los hospitales y hasta en nuestras casas. Pero la idea de los robots no es nueva. La palabra «robot» procede del checo robota, que significa «trabajo forzado». El escritor checo Karel Capek utilizó por primera vez esta expresión en 1921, con el significado que conocemos actualmente.

Sin embargo, varios siglos antes que Karel, hacia el año 1495, Leonardo da Vinci creó los bocetos de una armadura medieval compuesta por engranajes y poleas, capaz de mover los brazos, las piernas y levantar la visera del casco.

El ingeniero Mark Rosheim, especialista en robótica, siguió estos bocetos y construyó una réplica del caballero autónomo, ¡que funcionó a la perfección! A diferencia de los robots, que solo pueden hacer lo que están programados para hacer, Dios nos creó a nosotros con LIBRE ALBEDRÍO (Capacidad de elegir; de decidir por voluntad propia).

PODRÍAMOS HABER SIDO CREADOS COMO ROBOTS, PERO DIOS QUERÍA QUE FUÉRAMOS CAPACES DE AMAR, Y PARA AMAR DE VERDAD, ES NECESARIO TENER LA POSIBILIDAD DE ELEGIR.

Obviamente, también podemos tomar malas decisiones con nuestro libre albedrío. Es por eso que Josué pidió al pueblo de Israel que decidiera a quién servirían. Y tú, ¿a quién has estado sirviendo? ¿Cómo acostumbras ejercer tu capacidad de elección? Ora y pídele a Dios sabiduría para tomar buenas decisiones, y al igual que Josué…

… ELIGE SERVIR AL SEÑOR.

¿HAS AGITADO EL REPELENTE QUE HICISTE ANTEAYER? DEBES HACERLO DOS VECES HOY.


Devoción Matutina: El fascinante laboratorio de Dios
Mayara Lustosa y Rodrigo Barbosa