Mi Recurso Adventista

Oseas

02 de octubre | Devoción matutina: Siguiendo las huellas de los grandes personajes de la biblia

«Dice el Señor: «Yo, el Señor, soy tu Dios desde que estabas en Egipto: No reconozcas como Dios a nadie sino a mí, pues solo yo soy tu salvador»» (Oseas 13:4)

El libro del profeta Oseas es el primero de doce libros, que se conocen como los libros de los profetas menores. Se les llama «menores» porque sus profecías son más breves en comparación a las profecías de los profetas «mayores» como Isaías, Jeremías y Ezequiel. Oseas significa «salvación». Se considera que era originario del reino del norte, aunque sus mensajes proféticos (desde el año 755 hasta el 725 a.C.) estuvieron dirigidos tanto al reino del norte (Israel) como al reino del sur (Judá). Fue profeta en el reino del norte durante una época de bienestar material, que había sido la marca distintiva del reinado de Jeroboam II; pero esa prosperidad acabó en corrupción generalizada y en alejamiento de Dios por parte del pueblo. Por lo tanto, sus mensajes al reino del norte fueron una continuación de los mensajes que previamente el profeta Amós había compartido.

El mensaje central del libro de Oseas es el amor de Dios por su pueblo, a pesar de que seguían siendo infieles e idólatras. Dios utiliza el matrimonio como una ilustración del tipo de relación que él quiere tener con sus hijos. Como ocurre entre dos personas en un matrimonio, Dios quería que su pueblo se acercara a él, confiara en él, le fuera fiel solo a él… una relación similar a la de los esposos. De modo que, en este libro, Oseas representa a Dios; y su esposa Gomer, que lo abandonó, representa a Israel que abandonó también a Dios. Todo el país supo que Gomer había abandonado al profeta Oseas. Entonces Dios le dijo a Oseas que buscara a su esposa, la perdonara y restablecieran su relación como matrimonio. El matrimonio de Oseas era un ejemplo de lo que él quería hacer con su pueblo. Tal situación impactó a muchas personas más de lo que hubieran sido impactadas por muchos sermones.

Oseas nos recuerda que Dios es amor y que podemos volver a él, aunque nos hayamos alejado mucho o no hayamos sido fieles. ¿Estás dispuesto a vivir con Jesús hoy?


Devoción Matutina: Siguiendo las huellas de los grandes personajes de la biblia
César Sánchez Murillo