Mi Recurso Adventista

La única esperanza - Encuentra el sentido real de la vida

La vida es como un escenario. Tú abres el telón y ves los dramas, las luchas, los conflictos y la búsqueda incesante de los seres humanos. Gente que sueña, anhela y trabaja para encontrar un lugar al sol. Muchos nacen, envejecen y mueren sin llegar al puerto deseado. Algunos no saben ni siquiera de dónde vienen o hacia dónde van.Otros, después de caminar entre espinas, finalmente encuentran el sentido de la existencia.

Este libro presenta historias de personas que un día, en medio de circunstancias contradictorias, encontraron esperanza. Una luz las ayudó a mirar en la dirección del futuro con la seguridad de que existe un mañana mejor. La esperanza es el resorte propulsor de la vida. Ayuda a ver el sol a pesar de las nubes densas. Enseña a creer en otro día aunque, desde el punto de vista humano, todo parezca acabado.

La esperanza del cristiano no es meramente el deseo humano de que las cosas mejoren en el futuro. Es la convicción de que la victoria llegó, a pesar de la aparente derrota. Esa certeza nace de los valores absolutos de un Dios absoluto, que reveló la verdad en su Palabra. La Biblia es la fuente de la esperanza. Ella contiene más de tres mil promesas capaces de revolucionar la vida de quien cree en ellas.

En nuestro mundo conturbado, existe un pueblo con esperanza. Son hombres y mujeres que, a pesar de los dolores y de los sufrimientos, caminan con pasos firmes en dirección a un futuro glorioso. Esa actitud no es apenas una fuga de la realidad; no es la insensatez de enterrar la cabeza como el avestruz, ni de tapar el sol con un dedo. La esperanza de ese pueblo tiene un firme fundamento.

¿En qué cree ese pueblo? ¿Cuál es la razón de sus convicciones? ¿Cómo es posible caminar con actitud valiente en medio de tantas circunstancias adversas? Este libro te presentará los fundamentos de la única Esperanza del mundo, los fundamentos de la certeza de un futuro glorioso.

La única Esperanza
Encuentra el sentido real de la vida
Alejandro Bullón