Mi Recurso Adventista

Golazo

10 de noviembre | Devoción Matutina: Carácter ser como Jesús y disfrutar de la eternidad

«Respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mi lo hicisteis.» Mat. 25:40

El fútbol en muchos países se ha convertido en algo más que un deporte. Tanto es así que forma parte de nuestro hablar cotidiano. Si queremos indicar que alguien ha hecho algo perfecto, decimos que «lo ha metido por la escuadra». Si algo o alguien es realmente bueno decimos que es de «primera división»; si no es así, pertenece a la categoría de «segunda división». Cuando no se está en la onda se dice que «se ha quedado fuera de juego». Cuando a alguien le aplican un castigo, le «sacan la tarjeta roja». Cuando complica una situación, «embarra la cancha». Cuando sentimos que no nos prestan atención, «no nos dan bola». Y cuando alguien se compromete con algo, «se pone la camiseta».

En la Comuna 18 de «El Retiro» en Cali [Colombia] las pandillas son una realidad cotidiana. Los jóvenes no tienen muchas más salidas en la vida. Y a la ONG Ayuda en Acción no se le ocurrió otra idea que generar una alternativa a esa situación tomando el fútbol como excusa. Y así surge el proyecto “Golazo”, donde el deporte se emplea como espacio de canalización y oferta de posibilidades para los jóvenes. Entre patada y patada hacen talleres de lectura, aprenden valores y desarrollan sus talentos. Los creadores de este proyecto pensaron qué es lo que les atraía a esos muchachos y muchachas y lo adaptaron para cubrir sus necesidades. Es solidaridad bien pensada porque entusiasma y mejora.

Andrés era estudiante de Educación Física cuando se presentó como voluntario en un proyecto misionero de la ventana 10/40. Lo que sabía de él, como buen argentino, es que era aficionado al fútbol. Cuando comentaron su nombre en una comisión no supe bien lo que decir. Realmente me preguntaba qué podía hacer en un país del Este con su formación. No tuvo que pasar mucho tiempo antes de reconocer que mi pensamiento estaba completamente errado. Eran meses de mundial de fútbol y Andrés, con otros compañeros, montaron una escuela de fútbol en un entorno musulmán. E hizo mucho bien a esos pequeños. Cuando vino a la universidad a pedir camisetas para aquellos niños comprendí que lo importante no era el método sino el compromiso. Andrés llevaba puesta la camiseta de la solidaridad al igual que la ONG Ayuda en Acción.

Hay mucha gente que nos necesita y es momento de que te vengas a pie de cancha y metas algún que otro golazo. No te quedes fuera de juego.


Devoción Matutina: Carácter ser como Jesús y disfrutar de la eternidad
Víctor M. Armenteros