Mi Recurso Adventista

Ciro

27 de octubre | Devoción matutina: Siguiendo las huellas de los grandes personajes de la biblia

«En el primer año del reinado de Ciro, rey de Persia, y para que se cumpliera la palabra del Señor anunciada por Jeremías, el Señor impulsó a Ciro a que en todo su reino promulgara, de palabra y por escrito, este decreto» (Esdras 1:1).

Los mensajes de los profetas de Dios siempre se cumplen. Por ejemplo, el profeta Isaías anticipó el papel fundamental que jugaría Ciro, el rey de Persia, a favor de su pueblo ciento cincuenta años antes de que esto sucediera. El profeta Daniel predijo la caída del Imperio babilónico a manos de Medopersia. El profeta Jeremías habló de un prolongado cautiverio de setenta años, una de las razones por las cuales su ministerio fue rechazado por muchos. Los mensajes de estos tres profetas se cumplieron al pie de la letra.

Dios se refirió al rey Ciro como «mi pastor» (Isaías 44: 28), como un personaje a quien consagró (lee Isaías 45:1), y como el libertador del pueblo y facilitador para la reconstrucción del templo (lee Isaías 45: 13). Ciro no solo se dejó conducir por la voluntad de Dios, sino que además decidió cumplir con la profecía que lo mencionaba por su nombre más de cien años antes de que él naciera. ¿Cómo llegó a enterarse Ciro de esta profecía y qué lo impulsó a obedecerla? De los tres profetas que mencionamos, solo coincidió con Daniel, así que es de suponer que fuera él el que le mostrara lo que se había escrito. Por lo tanto, la política de Ciro consistió en dar libertad a todos los cautivos sin importar su lugar de origen.

De Babilonia salieron cerca de cincuenta mil judíos. Una experiencia que la Biblia compara al éxodo de Egipto. Ciro, sin ser un creyente en Dios, al menos hasta ese momento, desempeñó una función semejante a la de Moisés.

El pueblo recorrió unos mil cuatrocientos kilómetros hacia Israel. En aquel tiempo, ese trayecto representaba cuatro meses de caminata, pero se sentían alegres por estar libres. Las promesas dadas a sus antepasados los llenó de valor y esperanza. ¿Confías en las promesas de Dios que hay en la Biblia? Como cumplió con el pueblo de Israel, Dios también cumplirá sus promesas con nosotros.


Devoción Matutina: Siguiendo las huellas de los grandes personajes de la biblia
César Sánchez Murillo